“El poder y la gloria”, la gran novela de Graham Greene
Autores Literatura Novela Opinión Teresa Álvarez Olías

“El poder y la gloria”, la gran novela de Graham Greene

Los diálogos son descriptivos y certeros, muy precisos y escasos, mostrando la contradicción entre el objetivo del gobierno y la realidad de la gente.

Novela social y psicológica, ambientada en los años treinta del siglo XX, en un incierto estado de México, El poder y la gloria narra con maestría la odisea de un cura rural perseguido por ejercer su ministerio, ya que el gobierno había prohibido el catolicismo a la población en esa época.

El título nos transmite la ambivalencia entre dos valores que no siempre coinciden, ni mucho menos, porque muchas veces son antagónicos, como el cielo y la tierra, la vida y la muerte.

El autor, Graham Greene, es británico, de incierta religión e ideología, pero sabe traspasar el alma de México: su esencia católica, su sentido de la obediencia y la tradición, del destino y del deber, incluso en un momento en que la revolución prohibía ejercer el catolicismo.

Los pobres siguen siendo pobres, a pesar de la revolución que ha tenido lugar, pero la sumisión a la curia eclesiástica y a la autoridad, así como la corrupción de los funcionarios y policías, está latente. El autor entra de lleno en la realidad del pueblo, descubriendo las costumbres de la época en las aldeas solitarias: escasa comida, acato a la ley pero deseo de oficios religiosos por parte de los lugareños, analfabetismo, emigración y persecución política a las opiniones dispares. El cura, considerado traidor a la república, recorre en mula y también andando, la selva, el valle y los montes del estado, huyendo de los soldados que le persiguen por ser sacerdote, llegando al pueblo donde vive su hija natural con su madre, amante fortuita del protagonista siete años atrás. Abandona el lugar doliéndose del futuro destino de su hija, que ve muy negro. También la policía militar, los camisas rojas, que persiguen a un yanqui delincuente, están a punto de descubrirle varias veces, pero la suerte está de parte del cura. En su odisea quiere comprar vino, también prohibido, para decir misa en alguna parte. Encuentra al padre José, otro sacerdote perseguido, pero renegado de su profesión, casado y con hijos, y al punto es hecho prisionero por portar vino.

La cárcel a donde le conducen es un lugar inmundo donde se hacinan hombres y mujeres esperando juicio en condiciones infrahumanas. En prisión encuentra al mestizo que buscan también los camisas rojas y el director le deja marchar tras hacerle fregar las letrinas del establecimiento penitenciario. Después de mucho caminar, da con una choza donde aparece, un niño muerto al que quiere honrar, a pesar del peligro que corre de ser reconocido como sacerdote, y llega a cierto pueblo donde cree que van a fusilarle, pero, contrariamente, le aceptan en una casa de familia extranjera y puede bautizar a las criaturas del lugar.

Luego le llaman para que administre la extremaunción al yanqui moribundo y acude a verle, acompañado del mestizo huidizo también, ya repuesto de su enfermedad. Allí mismo, un teniente va a buscar al padre José para que nuestro cura pueda confesarse antes de ser fusilado. El teniente que ya le ha encontrado otras veces, le captura, pero el padre José rehúsa confesarle.

La novela se adentra en el corazón del protagonista, que se debate, a cada momento, entre el miedo a ser detenido para morir fusilado, el cumplimiento de su deber como sacerdote, y la necesidad de sobrevivir cada día en una huida atroz, contradicción característica de todas las obras de Greene.

El poder lo representa el teniente que le persigue y el director de la cárcel que lo apresa, los cuales no pueden tolerar la vida de un hombre justo que se preocupa por sus semejantes, en un mundo donde la miseria y la inseguridad de gobierno, de religión y de futuro son la moneda de cambio corriente.

El cura se reconoce poca cosa, pero su dedicación y bondad le contradicen. Representa la gloria, que llega a alcanzar, incluso cuando se pone precio a su vida y se le persigue como a un animal acorralado.

Los diálogos son descriptivos y certeros, muy precisos y escasos, mostrando la contradicción entre el objetivo del gobierno y la realidad de la gente. Se muestra con pelos y señales un paisaje, que es rural, mísero, apenas poblado, pero bellísimo, también en una paradoja evidente.

A pesar de situarse la novela en un tiempo pasado, la precisión de los detalles parece de absoluta actualidad y en ello reside la fuerza de esta eminente obra literaria.

Título: EL PODER Y LA GLORIA; CAMINOS SIN LEY
Autor: GRAHAM GREENE. Primera edición 1940. Segunda edición: 1998.
Nº de páginas: 374.
Encuadernación: Tapa blanda.
S.A. EDITORIAL PORRUA.
ISBN: 9789700710365.

Teresa Álvarez Olías

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